Oct 1, 2007

Hace unos días

Han pasado bastantes días y por fín dedico un rato a escribir algo.

Estaba esperando el autobús y para un coche. La chica que conduce baja la ventanilla del acompañante y me pregunta cómo ir a una Conselleria. Se me ocurre que puedo aprovechar el viaje y le digo si le importa llevarme hacia el centro y le digo por el camino cómo llegar donde dice. Se queda sin saber qué hacer pero echa mano de la cosas que tiene en el asiento libre y subo al coche.

Le digo que es un nuevo servicio del ayuntamiento, eso de acompañar a personas de fuera que no conocen la ciudad. Se ríe, le pregunto que a qué Conselleria va, y estamos un rato hablando de dónde viene, qué hacer, etc. Por un momento, me hace gracia verme simpático, dicharachero, jovial,... vaya, vaya, a ver si.......

Va a Aguilera 1, así que le digo que puede aparcar o bien en el mismo Corte Inglés o en la entrada de antes subiendo por Oscar Esplá, que es el aparcamiento de Maisonave..

Momento después me dice : - ¿Dónde le dejo ?

Cuando bajo del coche a la entrada del parking decido contar este pequeño cuento.

Es el marido de la señora de la tienda, alto, callado, silba......silba muy bien.

Cerca de casa hay una tienda pequeña que siempre está abierta, domingos incluído, y a veces compro algo que me falta. Normalmente está una señora, pero entra y sale a ciertas horas su marido.

Un día al salir de otra tienda próxima me llamó la atención que alguien silbaba muy bien, son sonido fuerte y sin ninguna melodía conocida; eran más bien sonidos improvisados, trinos, gorjeos, gorgoritos,...

Más tarde, otro día, tuve la oportunidad de decirle algo, aunque nunca había hablado antes con él, y le hizo gracia. Así han pasado varios meses y hace unos pocos días, veo por la calle que viene de frente, rápido porque empezaba a llover.. Cuando estaba a dos metros escasos,me reconoció y mientras pasaba deprisa a mi lado empezó a silbar como siempre, fuerte, claro, agradable de oír. Me entró la risa y dije para mí.....

Bueno, no pongo aquí lo que pensé porque creo que da para un cuento corto, muy corto que podréis leer a continuación.

Un cuento más corto que el de Monterroso

Me meo



(cuento corto escrito por un servidor tratando de entrar en el libro de records, en el Guinness. Alicante, octubre 2007)